Las zapatillas, los vaqueros y el polo tendencia en 2024 dicen mucho de la moda ahora
Por DModa - 21 de mayo de 2024 - moda
En plena oleada ladylike, muchos de los productos de lujo más buscados y deseados (según Lyst) parecen entrar en contradicción con lo que las propias pasarelas y firmas proponen. Al menos, en apariencia.
Estamos en un momento ladylike, clásico. Conservador, incluso. Las tendencias de primavera-verano 2024 lo dejaron tan claro como las de la temporada anterior; tan cristalino como lo que ya se ha visto entre las tendencias de otoño-invierno 2024/2025. Y sin embargo, entre las redes sociales, parte del street style y las propuestas de las tiendas más accesibles (especialmente las de moda rápida), el minimalismo y el giro hacia estilos más canónicamente femeninos se mezclan con un curioso maximalismo colorista ahora bautizado como estilo portugués (aunque bebe del ya conocido danés) y las ya habituales querencias deportivas. Porque lo cierto es que por mucho que el casual haya perdido buena parte de su fuerza los últimos años, se enraizó con tanta fuerza en los armarios y en las costumbres diarias que extraerlo por completo podría considerarse imposible. Es más, ni siquiera puede eliminarse del universo del lujo, que durante tanto tiempo miró con reticencia el chándal y las zapatillas. Y el producto de moda más deseado y buscado según Lyst, lo demuestra: las zapatillas de Miu Miu x New Balance.
Las listas y los índices que cada cuatrimestre publica Lyst, la plataforma tecnológica de moda (y app para comprar moda de lujo) siempre resultan de interés para medios especializados: al fin y al cabo, utilizan distintas tecnologías para valorar algo tan aparentemente intangible como el deseo de los consumidores. En concreto, para determinar cuáles son los productos más populares, Lyst filtra más de ocho millones de artículos por volumen de menciones en redes sociales "junto con búsquedas, visitas a páginas, interacciones y ventas" dentro de la propia aplicación. Además, tienen en cuenta "la demanda global por volumen de stock disponible". Vaya, que el análisis es bastante completo.
Lo que la investigación ha aportado en los primeros meses del año es que Miuccia Prada vive un buen momento, teniendo en cuenta que Miu Miu y Prada son la primera y la segunda marcas más populares. Y también que puede que haya una nueva manera de entender el clasicismo; una que tiene que ver más con los orígenes del preppy que con la estilización audiovisual que se ha hecho de esta estética. Es decir, que ver en el primer puesto del ranking las zapatillas que Miu Miu ha hecho en colaboración con New Balance no es una afrenta directa a los kitten heels y su feminidad: es el híbrido perfecto entre lo clásico (lo pijo, si lo prefieres) y lo deportivo y casual. Athleisure 4.0.
Las braguitas naranjas parecen estar cortadas por la misma tijera que las zapatillas, y no solo porque también pertenezcan a Miu Miu: se trata de que en ellas está el mismo espíritu preppy, el que también aparece en el polo que ocupa el puesto número siete de la lista. Al fin y al cabo, el estilo pijo universitario y casual nació en los centros de élite de Estados Unidos en general y en los grupos deportivos de esas Universidades en particular. Y vale que no todos los que lo llevaban practicaban algún deporte, pero las raíces son las raíces.
Parte de ese preppy también está en la prenda número cinco, la chaqueta Detroit de Carhartt, que parece ir a las mil maravillas tanto con las mencionadas zapatillas como con el polo. Y todo ello quedaría igualmente bien con los únicos pantalones que aparecen en el top 10, que son ni más ni menos que unos vaqueros de Area. ¿Vaqueros, en el momento cumbre de vestidos y faldas? Así es. Porque curiosamente, el único vestido que aparece, firmado por Rick Owens, responde más al canon de la femme fatale que al de la chica buena. Eso sí, no deja de ser otro arquetipo femenino normativo.
¿Y qué hay de los accesorios más clásicamente femeninos, como los pendientes Julius de Khaite, otra de esas firmas abanderadas del lujo chic y discreto, las bailarinas de tachuelas de Alaïa o el bolso Rodeo de Balenciaga? Pues que a pesar de que podrían conjugarse con faldas de vuelo y vestidos de mangas abullonadas, poseen cierta actualización que les permite aparecer junto a piezas más relajadas sin perder efectividad.
Si somos lo que buscamos, si buscamos lo que deseamos, ¿qué queremos ahora mismo en materia estética, según esta clasificación? ¿Qué dice de nosotros este ranking? Pues que, efectivamente, nos estamos volviendo un poco más clásicos, pero que eso no significa que vayamos a dejar de lado la comodidad que nos han aportado estéticas que, en su momento, se salieron de la norma de la elegancia del momento. Porque aunque ahora el preppy sea una de las cosas más tradicionales que se te pueden ocurrir, en su momento levantó cejas.